Al que yerra perdónale una vez, pero no después
Un hombre que a pesar de ser un ex convicto, consigue una segunda oportunidad para trabajar, pero pronto se ve inmiscuido nuevamente en problemas con la policía, por lo que Caro y Rodri se darán a la tarea de resolver un nuevo caso.
Que se pierdan los anillos pero que se conserven los dedos
Raro es el regalo tras el que no se esconde algo malo
Hace más una hormiga andando que un gigante parado
Lo que me cuentan no creo, sino lo que veo
La envidia y la fiebre, matan a quien las padece