Gran oportunidad

Rodolfo continúa teniendo sus dudas con respecto al atentado. Sin haberlo planeado llega a la universidad para tratar de conocer la verdad. Se encuentra con Andrés, quien siembra dudas en Arismendi por el nerviosismo que tiene al hablar.

Arismendi sigue dolido por la conducta de Luisa Fernanda, desearía que las cosas hubieran sido de otra forma, por ello acepta que no hay vuelta atrás, se casará con Alicia Suárez.

Después del alboroto que hubo en la jefatura, los novios un poco más calmados continúan con la ceremonia. Entre irritada y triunfadora, Alicia afirma a las preguntas que le hace el juez, mientras que Rodolfo titubea un poco. Contestará: ¿Sí, acepto?

Miriam se entera que el autor del atentado fue Miguel Enrique. Linares muy dolida comprende que cayó en una trampa para salvar a Toro, necesita explicaciones para que no se le termine de romper el corazón. Ignacio y Miguel deciden ir a la universidad.

Miriam y Picure se refugian el uno en el otro. La joven enamorada, sólo piensa en Toro, el niño le acompaña haciéndole saber que Justo desea adoptarlo, pero él no aceptó porque no quiere abandonar a Linares.

Toro y sus amigos están furiosos con Andrés, quien supuestamente se ha ido de viaje, este último es el único que puede resolver el conflicto de Luisa Fernanda.

Emilio lleva a Ignacio a la universidad, este último se deja caer en el asiento de su carro, derrotado por el alcohol. Por otra parte, Alicia no cabe de la felicidad, sabe que alejando a Luisa, Rodolfo será solo para ella.

Miriam y Picure escuchan unos ruidos estruendosos en el estacionamiento de la universidad, sin saber que se trata de Alicia, quien le está destrozando el carro a Luisa Fernanda.

En la universidad, Riera queda sorprendida cuando va a recoger su carro y lo encuentra destrozado. Rodolfo se acerca al automóvil y nota que pertenece a Luisa. En un encuentro fatal, la protagonista le anuncia a Arismendi su decisión...

Miguel Enrique recoge a Luisa en su clase de flamenco. Rodolfo no aguanta los celos, quisiera huir rápidamente sin tener que presenciar la escenita de amor entre los dos jóvenes. Ella pavonea del brazo de Miguel hasta que se marchan de allí.

Después de la escena que hizo Rodolfo con Luisa, ésta queda más contrariada que antes con respecto a sus sentimientos, cuando Alejandra vuelve a sentir un mareo y Luisa le advierte que dicho malestar puede deberse a un posible embarazo.

Gustavo tiene que darle las buenas noticias a su amiga Alejandra, ha recibido una notificación de la beca en el exterior, su sueño se hará realidad. Lejos de esa felicidad, Luisa se siente sola, a pesar del apoyo de Juanita.

Miguel Enrique va a recoger a Luisa para terminar los últimos detalles de la boda. Juanita va a despertar a su niña cuando se encuentra con que Luisa no reacciona y consigue un frasco de pastillas vacío.

Bombón no se resiste al atractivo de Miguel y le ofrece el cielo si es preciso con tal de estar con él, apático Toro sólo piensa en Luisa Fernanda, quien por su parte arrincona a Rodolfo proponiéndole irse lejos.

Vizencio enardecido por el baile de Isabel, aconseja a Rodolfo para que impida la boda de Luisa, Arismendi lo piensa, puede ser su última oportunidad para recuperar al amor de su vida. Mientras que la protagonista se prepara para el inicio de su boda.

Rodolfo está destruido, no consigue palabras para confesarse con Alicia. Ella insiste en irse, no deben ventilar sus problemas delante de los demás. Rodolfo harto de guardar sus sentimientos, destruye a Suárez revelándole que ama a Luisa Fernanda.

Luisa se ve preciosa con el vestido de novia, su padre está muy orgulloso. Luisa nota que el automóvil no arranca y al apresurar al chofer, descubre una gran sorpresa.

Liliana asustada ante la insistencia de los golpes en la puerta de su casa, abre para encontrar a Miguel Enrique, quien desesperado, busca a su esposa y a Rodolfo Arismendi.

Rodolfo y Luisa viven su amor intensamente, el paisaje romántico y tranquilo de las olas los lleva al éxtasis de la felicidad. Arismendi sorprende a Luisa, reiterándole que, de ahora en adelante, tendrá que adaptarse a vivir sin los lujos.

Extasiados por la maravillosa noche que pasaron, Luisa y Rodolfo llegan a su habitación. Mientras Arismendi se toma un baño, la protagonista aprovecha para pedir un exquisito menú y una selecta botella de Champagne.