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Paz descubre que está embarazada. Filipa sale de prisión. El psiquiatra no cumple las órdenes de Ginebra y no secuestra a Samara. Esteban sospecha que Kenzo podría estar trabajando para Ginebra.
Mauro acude con su socio, Ramsés Torrenegro, para pedirle que le ponga un alto a Ginebra y salve a Samara. Paz hace un anuncio público en el que le pide a Ginebra que deje en paz a su familia. Kenzo le confiesa a Esteban que trabaja para Ginebra.
Ginebra obliga a Kenzo a que le dispare a Esteban. Más tarde, Mauro, Jerónimo y Filipa desentierran a Esteban y lo reviven. Mauro le pide perdón a Samara por todo el daño que le hizo. Ginebra conoce en persona a Ramsés Torrenegro.
Ginebra le pide a Ramsés que sean socios. Durante el falso funeral de Esteban, Ginebra llega con intenciones de matar a Elvira. Por accidente, Ginebra se envenena a sí misma y su mano comienza a sufrir necrosis, por lo que Mauro se la corta.
Paz da a luz a una niña. Esteban y Paz planean cómo detener a Ginebra. Al enfrentarse en un basurero, Mauro confronta a Ginebra. Ella le clava un cuchillo en el cuello y Mauro clava una daga en el pecho de Ginebra. Ambos mueren abrazados como hermanos.
